martes, 9 de marzo de 2010

La fuerza desconocida de la palabra- Entrevista a Alma Karla Sandoval

Alma Karla Sandoval es una joven poeta originaria de Jojutla, Morelos, egresada de la Escuela de Periodismo Carlos Septiém García y de la Escuela de Escritores de la Sogem. Actualmente es Profesora de Cátedra del Instituto Tecnológico de Monterrey, Campus Cuernavaca y colabora también para el periódico La Jornada de Morelos y articulista del semanario Maseual. A su corta edad tiene ya tres libros publicados: Corredor de las Antorchas (2000), Todo es edad (2003) y Estacionamiento de Avestruces (2006) y el poemario La misma escarcha (2009). Sus amplia obra poética se encuentra publicados en las siguientes antologías: Espiral de los latidos, poesía joven del centro (2001), Del silencio hacia la luz: Mapa poético de México (2007), Adornos de papel (2008), y Mujeres Poetas en el País de las Nubes (2008). Entre sus textos se puede leer un estilo espontáneo, y unido bajo ciertos temas y preocupaciones comunes.

“Las palabras son actos, dice Octavio Paz, son conjunciones y consumaciones y pesan tanto como los hechos, al menos para alguien que está comprometido, comprometida por la palabra, como yo.” Dice Alma Karla Sandoval de manera reflexiva mientras atribuye tanto de su propia vida al poder de la palabra. “Sin la palabra, ¿qué historia hubiera contado San Juan, por ejemplo?”, continua cuestionándose.

Karla es una poeta reconocida; sus poemas generalmente van envueltos de un tono muy íntimo, en el que hace cómplice o parte de esto al lector, todo ello lo logra a través de un manejo impecable de la palabra. “La palabra no solo cambia, no solo transforma, sino que también aquieta. La palabra tiene un poder creo que todavía incomprensible.” Remata esta idea diciendo: “Hablar es lo que cura.” Con ello le atribuye el poder de vida a la palabra, el poder del ser, el poder que ella maneja al ser periodista y poeta.

  • - Tú que trabajas en el periódico pero también escribes, que prefieres, hablar de la realidad y del mundo como en los periódicos, o crear mundos con tus poemas, cuentos, etc.?
  • - Las dos cosas, ¿quién dijo que no se puede mezclar la realidad a veces tan cruenta, y si no siempre tan mezquina de nuestro mundo y de nuestro continente con la ficción o con la literatura?

Con esto último Karla aprovecha para citar a uno de los ensayistas que más admira, Claudio Magris, quien dice que los escritores que provienen del universo de los periodistas, quienes se han formado en lass alas de redacción o han reporteado son una extraña raza de autores que es invencible, pues en una mano tienen el peso del mundo con su realidad amarga y en la otra las alas de la ficción. “Poder mezclar las dos cosas es quizás la fórmula para conseguir una obra inolvidable.”

Tal vez este sea el objetivo primordial de cualquier persona que escribe; el inmortalizarse a través de la memoria ajena. Karla provee la respuesta para lograr dicho objetivo en cuanto a lo que se refiere en su opinión. Con esto le otorga un gran peso de ser al periodismo en sí; lo sitúa junto a la literature y hace un híbrido que hace de la cruza entre los dos. Esta última idea hace surgir una duda entre los entrevistadores.

  • - Tú te llevas mucho de la realidad a la ficción para trabajar en eso, pero ¿qué tanto de la ficción te llevas al periodismo, a la realidad?
  • - Es complicado llevarte... y más ilegal, no se vale llevarte de la ficción a la realidad, ese es un traspaso imposible. El desplazamiento que va de la realidad a la ficción es válido, pero en periodismo no puedes mentir.

Karla continua hablando sobre el cruce entre realidad y ficción. Ese empalme entre ambos mundos que solo la literatura puede tocar al mismo tiempo y el periodismo busca hacerlo bajo otros medios. “La dosis literaria que contiene el periodismo es el estilo. No puedes cambiar los hechos, pero sí puedes decirlos con elegancia, con pulcritud, con originalidad, con agilidad y esos son valores de lo literario.”

Un buen reportero debe tener un gran acerbo literario, pues de modo contrario no logrará tomar parte en el crucero que lleva al éxito, el cual se construye además, según Alma Karla, desde el fondo; tocando otros géneros. “Los mejores periodistas se han formado así, Manuel Buendía, por ejemplo empezó en la nota roja. A mis alumnos siempre les comento que no hay major enseñanza para un reportero que trabajar la nota roja. Tenemos muchos prejuicios en cuanto al periodismo de alto tiraje.” Karla continua hablando frente a sus entrevistadores. Sentada con su vestido rojo impregna el ambiente de grandes conocimientos adquiridos a través de una reconocida experiencia en un ámbito que se juzgó mucho tiempo como una carrera inexistente, como lo afirma Karla.

  • - Seamos honestos también, la enseñanza del periodismo tiene muy pocos años en América Latina. No tenemos ni viente años que se está enseñando periodismo en las escuelas. Todo mundo decía esa carrera no existe.

Es una carrera que no existía hasta hace veinte años. Sin embargo, en el ámbito en el que se vive hoy en día en nuestro país, en nuestro continente, es necesario afirmar que el periodismo cada día toma más fuerza. Más allá de estarse extinguiendo, como algunos creen, tal vez se está transformando. Hace algunos años se creía que era una carrera inexistente. Hoy algunos piensan que es una carrera en extinción. Más allá de todo eso, creo que es a través de personalidades como Alma Karla Sandoval que podemos rechazar esa última idea. La palabra no se extingue, el expresarla no se acaba y existen personas que no se sacian de hacerlo. Ellos son los literatos, ellos son los grandes periodistas que aprenden a unir ambos ámbitos al tocarlos con la sed del saber, con la sed de la palabra. Entre ellos está Alma Karla, una poeta y una periodista “muy inquieta, con muchas ganas de aprender todo, de devorarlo todo, de entenderlo todo.” Eso es lo que mueve a la palabra, lo que le da su fuerza y por eso los ámbitos que se forjan de ella no pueden desaparecer.

No hay comentarios:

Publicar un comentario